Para tus recetas de galletas, bizcochos, magdalenas o cupcakes, te indicamos cómo hacer tu propia buttermilk casera, así no tendrás que salir a comprarla.
Para hacer nuestra propia buttermilk casera o suero de mantequilla, tenemos que exprimir un limón, para obtener su jugo.
Una vez que tengamos el zumo de limón lo echaremos en el bol donde tengamos la leche. Es muy importante mantener las proporciones para que nuestra buttermilk quede perfecta.
Una vez que mezclemos bien la leche y el zumo de limón, removeremos bien y dejaremos reposar unos 10 minutos, a temperatura ambiente.
Pasado este tiempo comprobarás que la leche tiene la apariencia de la leche cortada, como si fuera un yogur muy líquido. Antes de usar la buttermilk para crear nuestros postres, remueve bien la mezcla.
Foto orientativa: JD Hancock
Aunque se desconoce su procedencia, los raviolis fritos es un plato que triunfa en Norteamérica. Ideal para acompañarlos con cualquier salsa.
Esponjosos y tiernos gofres con sabor a chocolate y un toque de vainilla. Los acompañamos de un poquito de miel y fruta ¡y ya tenemos el bocado perfecto!
¡Aprende a hacer tu propio queso fresco casero con cuajo o con limón! Es más fácil de lo que te piensas, y te permitirá darle el sabor que más te guste.
Estupendo postre tradicional de Estados Unidos, hecho principalmente con frambuesas y nectarinas cubiertas por una capa de masa y ¡acompañado de helado!
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