Para picar y mojar chips o patatas fritas, la salsa de jengibre y ajonjolí es una rica mezcla que no deja indiferente a nadie. ¡Es fácil y rápida!
Empezamos haciendo la mayonesa, que será la base principal de nuestra salsa de jengibre y ajonjolí.
Para ello, optamos por un tipo de mayonesa sin huevo, que además es muy fácil de hacer: en el vaso de la batidora, batimos una mezcla idéntica de leche entera y aceite de oliva o de semilla (como prefiráis), más una pizca de sal y unas gotas de zumo de limón. La batida de esta mayonesa sin huevo hay que hacerla como la de una mayonesa normal: a velocidad alta, y subiendo y bajando.
Hecho esto, para dar forma a la salsa de jengibre y ajonjolí llevamos la mayonesa a un bol, y mezclamos con el resto de ingredientes: el vinagre, la salsa de soja, el jengibre rallado, el aceite de ajonjoli y el cilantro. Removemos muy bien para integrar todo, y al final, echamos el cebollino picado muy fino.
La salsa de jengibre y ajonjolí se puede conservar en el frigorífico durante bastantes días, a ser posible tapada.
¿Tienes visita en casa, y quieres preparar una comida informal pero deliciosa? ¡Prueba esta sencillísima receta de brochetas de pollo con salsa de jengibre!
Descubre cómo hacer tu propio jengibre confitado en casa. Una receta fácil y con un resultado, ¡espectacular!
Cremosa salsa roquefort hecha con queso, nata líquida y el toque justo de aceite. El acompañamiento ideal para carnes, pastas, patatas, verduras y pescados.
La salsa agridulce típica de los restaurantes chinos: un clásico de la cocina oriental para acompañar platos de carne, pescado, arroz, verduras, etc.
Descarga las mejores recetas de Pollo
Recetas con pollo fáciles para todos los gustos y para cualquier ocasión. ¡Deliciosas!
Arroces
Bebidas
Carnes
Dulces
Ensaladas
Frutos secos
Guarniciones
Huevos
Legumbres y cereales
Mariscos
Masas
Panes
Pasta
Patatas
Pescado
Pizzas
Quesos
Salsas
Setas
Sopas y cremas
Verduras
